Los scores de riesgo son herramientas esenciales en la medicina cardiovascular para estratificar el riesgo de eventos recurrentes en los pacientes y para guiar las estrategias de prevención secundaria. Así como una de las puntuaciones validadas para pacientes con infarto de miocardio (IM) es la Puntuación de Riesgo de Trombolisis en Infarto de Miocardio para Prevención Secundaria (TRS-2P), la imagen intravascular, más específicamente la tomografía de coherencia óptica (OCT), se ha convertido en la piedra angular para la evaluación de placas coronarias de alto riesgo (PCAR) como el fibroateroma de capa fina (TCFA), un núcleo lipídico grande o la ruptura de placa. Estudios previos demostraron que la OCT identificó la presencia de placas de alto riesgo en hasta un 48% de las arterias no culpables en pacientes que presentaban un síndrome coronario agudo (SCA). El objetivo del presente estudio, liderado por Rick H.J.A. Volleberg y colaboradores, fue evaluar la asociación entre los factores de riesgo clínico y las PCAR, así como el impacto clínico de las PCAR en diferentes perfiles de riesgo clínico.

Se trata de un análisis combinado de datos de pacientes individuales de los estudios observacionales prospectivos COMBINE (OCT-FFR) y PECTUS-obs. Se incluyeron un total de 810 pacientes (390 del estudio COMBINE y 420 del estudio PECTUS-obs). Utilizando la puntuación TRS−2P modificada, los pacientes se estratificaron en grupos de riesgo bajo (38.4%), riesgo intermedio (32.7%) y riesgo alto (28.9%).

El criterio de valoración principal fue un compuesto de eventos cardiovasculares adversos mayores (MACE), el cual se evaluó a nivel de paciente y el fracaso de la lesión objetivo (TLF), que se evaluó a nivel de lesión.

La prevalencia de PCAR  detectadas por OCT  fue consistente en todas las categorías de riesgo clínico: 32.8% en pacientes de bajo riesgo, 32.1% en riesgo intermedio y 35.9% en riesgo alto. No se observó una interacción significativa entre los estratos de riesgo y los resultados asociados a PCAR. La TRS−2P no mostró capacidad discriminatoria para detectar PCAR (área bajo la curva 0.51).

Los pacientes clasificados como de bajo riesgo tuvieron un aumento en las tasas de eventos en presencia de PCAR, mientras que los pacientes de alto riesgo sin PCAR exhibieron tasas de eventos comparativamente más bajas. No obstante, los pacientes con la combinación de alto riesgo clínico y PCAR definida por OCT mostraron las tasas de eventos absolutas más altas entre todos los grupos (6.28, IC del 95%: 3.52-10.36; 13.6% de riesgo absoluto a los 2 años).

 

CONCLUSIONES:

Las placas coronarias de alto riesgo (PCAR) identificadas por OCT se asocian con un pronóstico negativo, independientemente de la estratificación del riesgo clínico. Por lo tanto, las puntuaciones de riesgo clínico como la puntuación TRS−2P no predicen la presencia de PCAR, lo que subraya el valor independiente de la OCT para la evaluación pronóstica en pacientes con infarto y lesiones asociadas.

 

Dra. Giuliana A. Supicciatti
Miembro del Comité Editor CACI

 

TÍTULO ORIGINAL: Impact of clinical risk characteristics on the prognostic value of high-risk plaques.

CITA: Volleberg et al. EuroIntervention. 2025; 21:e1147-58.

REFERENCIA: DOI: 10.4244/EIJ-D-25-00307