La clasificación por etapas de la estenosis aórtica (EA) que caracteriza la extensión del daño cardíaco ha sido validada en pacientes sometidos a implante valvular aórtico percutáneo (TAVI). Genereux et al. propusieron un sistema de estadificación para cuantificar la extensión del daño cardíaco en pacientes con EA basado en datos del estudio PARTNER. Se desconocen los cambios a corto plazo en el daño cardíaco después de TAVI y su asociación con el pronóstico a largo plazo. Este estudio buscó investigar la evolución a corto plazo en relación al daño cardíaco después de TAVI y la asociación de daño cardíaco residual con resultados a largo plazo.

Se incluyeron 644 pacientes consecutivos sometidos a TAVI en el Segundo Hospital Adscrito de la Escuela de Medicina de la Universidad de Zhejiang entre el 1 de marzo de 2013 y el 1 de marzo de 2020.

Se utilizó el sistema de clasificación de daño cardíaco por etapas propuesto por Généreux et al, clasificando a los pacientes en cinco grupos dependiendo de la presencia o ausencia de cardiopatía extravalvular evaluado mediante ecocardiografía transtorácica:

Etapa 0: Sin ningún otro daño cardíaco extravalvular.
Etapa 1: Daño del VI (FEVI < 60%, índice de masa VI > 95 g/m2 para mujeres, > 115 g/m2 para hombres o disfunción diastólica del VI ≥ grado II).
Etapa 2: Daño de la aurícula izquierda o de la válvula mitral.
Etapa 3: Daño de la vasculatura de la arteria pulmonar o disfunción de la válvula tricúspide.
Etapa 4: Daño del ventrículo derecho (VD).

Se definió cambio temprano en el daño cardíaco como la evolución del estadio de daño a los 30 días. En consecuencia, los pacientes se dividieron en tres grupos: mejoría (mejoría en al menos 1 etapa), ningún cambio y deterioro (empeoramiento en al menos 1 etapa).

Los pacientes tenían una edad media de 75,8 años y el 58,1% eran hombres. Los participantes fueron clasificados en cinco grupos (de 0 a 4) según su estadio basal de daño cardíaco. En general, los pacientes mayores con las etapas más avanzadas tenían puntajes STS más altos, niveles más altos de NT-proBNP, mayor prevalencia de fibrilación auricular y síntomas cardíacos severos (NYHA Clase ≥3).

A los 30 días post-TAVI, todos los grupos obtuvieron alivio sintomático en cuanto a su clase funcional NYHA. En cuanto a la FEVI, fue peor en el grupo de estadio avanzado al inicio del estudio (p<0,001). La etapa de daño cardíaco cambió en el 22,2% de los receptores de TAVI dentro de los 30 días posteriores al procedimiento. El 19,9% de los pacientes obtuvieron beneficios en la reversión del daño cardíaco. En concreto, el número de pacientes en el grupo etapa 0-1 aumentó de 92 a 157, mientras que la proporción del grupo en etapa 3-4 disminuyó del 19,4% al inicio al 10,5% dentro de los 30 días post-TAVI.

En general, la mayor parte de la reversión del daño cardíaco ocurrió dentro del primer mes post-TAVI. De los pacientes con línea de base en etapas 3-4 (n=117), el 59% de ellos vieron mejoras tempranas en el daño cardíaco dentro de los 30 días posteriores a TAVI. Durante un período medio de seguimiento de 2 años después de TAVI, se produjeron un total de 43 muertes (6,7%). La mortalidad por todas las causas a los 2 años aumentó gradualmente con etapas avanzadas de daño cardíaco inicial (p=0.014). Además, el estadio de daño cardíaco a los 30 días post-TAVI mostró una mayor asociación con resultados a 2 años (p <0,001). En comparación con los pacientes con daño cardíaco sin cambios, los pacientes con deterioro cardíaco se asociaron con un mayor riesgo bruto de mortalidad a los 2 años (p < 0,001). Tras el ajuste multivariable, el deterioro cardíaco dentro de los 30 días post-TAVI fue un factor de riesgo independiente para mortalidad a los 2 años (p < 0.001). Además, la puntuación STS también se asoció con el pronóstico (p=0,002).

Conclusiones:

Este estudio es el primero en confirmar el impacto pronóstico de los cambios residuales y tempranos en el daño cardíaco, evaluados mediante ecocardiografía, dentro de los 30 días post-TAVI en una cohorte grande, no seleccionada, del mundo real. El deterioro cardíaco dentro de los 30 días se asocia con un mal pronóstico clínico.

Dra. Giuliana A. Supicciatti
Miembro del Comité Editor CACI

Título original: Impact of early changes in cardiac damage following transcatheter aortic valve implantation
DOI: 10.4244/EIJ-D-22-00817