El reemplazo valvular aórtico percutáneo (TAVI) se ha posicionado como una de las principales estrategias de abordaje terapéutico para pacientes con estenosis aórtica severa sintomática. Así, uno de los estudios diagnósticos que puede modificar la estrategia es la angiotomografía computada con protocolo para TAVI, que no solo permite caracterizar la anatomía del anillo valvular aórtico, sino también identificar y caracterizar la presencia de aterosclerosis, lo cual puede tener implicancias durante el procedimiento.
La presencia de aterosclerosis puede modificar la estrategia del procedimiento vinculado al TAVI, como el acceso vascular utilizado, la elección de la bioprótesis valvular y su dispositivo de liberación, entre otros. En este contexto, se ha demostrado que el grosor de los ateromas aórticos y el volumen de placa están asociados con la ocurrencia de accidente cerebrovascular (ACV) periprocedimiento y eventos tromboembólicos. Sin embargo, hasta la fecha, no se ha explorado el impacto de la ulceración y de las placas ateroescleróticas con elementos protruidos (PAP) en el TAVI.
El objetivo del presente estudio realizado por Shinnosuke Kikuchi y colaboradores del Strasbourg University Hospital (Francia) fue analizar la influencia de las PAP y las úlceras aórticas en la ocurrencia de ACV vinculado al TAVI.
Para ello, se llevó a cabo un estudio unicéntrico observacional retrospectivo, que incluyó pacientes con estenosis aórtica severa sometidos a TAVI en el período comprendido entre febrero de 2010 y mayo de 2019. Se analizaron las imágenes obtenidas a partir de la angiotomografía con protocolo para TAVI realizada antes del procedimiento, identificando la presencia de PAP (definidas como ateromas ≥3 mm con elementos protruyentes hacia el lumen vascular) y placas ateroescleróticas ulceradas (definidas como ateromas con disrupción de la íntima), así como su asociación con la ocurrencia de ACV periprocedimiento como objetivo primario (dentro de los primeros 30 días posteriores al procedimiento índice).
Se incluyeron en el análisis un total de 977 pacientes. La edad promedio de la población muestral fue de 82.7 años, con un 46% de sexo masculino. Se observó que el subgrupo de pacientes con presencia de PAP y placas ulceradas presentaba una mayor carga de comorbilidades cardiovasculares concomitantes en comparación con aquellos sin aterosclerosis con estas características. En la cohorte analizada, la incidencia de ACV periprocedimiento fue del 4.4%. Asimismo, el subgrupo con PAP y placas ulceradas mostró una mayor prevalencia de ACV periprocedimiento en comparación con aquellos sin estas placas, con una diferencia estadísticamente significativa entre ambos subgrupos (8.0% vs. 3.2%; p=0.003).
Se identificó la presencia de PAP y placas ateroescleróticas ulceradas como factores predictores independientes de ACV periprocedimiento (HR ajustado 2.55 [IC95% 1.37-4.74]), particularmente aquellas localizadas en el cayado aórtico (HR ajustado 3.86 [IC95% 1.69-8.83]). Además, en términos de la tecnología de prótesis valvular utilizada, se observó que la presencia de PAP y placas ulceradas fueron factores independientes de riesgo de ACV periprocedimiento en el TAVI con prótesis autoexpandibles (HR ajustado 9.04 [IC95% 1.59-51.4]), mientras que no se encontró esta asociación en el TAVI con prótesis balón expandibles (HR ajustado 2.85 [IC95% 0.92-8.84]).
Conclusiones
En pacientes con estenosis aórtica severa sometidos a TAVI, la presencia de placas ateroescleróticas ulceradas o con elementos protruidos se asoció con una mayor ocurrencia de accidente cerebrovascular periprocedimiento, especialmente en el TAVI realizado con prótesis autoexpandibles.
Dr. Cristian M. Garmendia
Miembro del Comité Editor CACI
Título original: Protruding and Ulcerated Aortic Atheromas as Predictors of Periprocedural Ischemic Stroke Post-Transcatheter Aortic Valve Replacement.
Cita: Kikuchi S, et al. JACC: Asia. 2025;5(2):258–269